Bueno, ahora sí que sí. Parece que ya me tengo que hacer a la idea de que esta experiencia ya se acaba definitivamente. Ayer empezaba mi último fin de semana por Paraguay y mi mente parece haber viajado ya a la ciudad condal. Llegados a este punto de mi viaje, ahora ya toca pensar en los regalitos que me gustaría dar a mi familia y mis amigos en Barcelona.
Así que ayer por la mañana, después de haber descansado un poco de mi intensa despedida de Villa Elisa que incluyó un partido de fútbol, nos fuimos al centro de Asunción con Miquel, Pati y Javi. Allá es donde se encuentran la mayoría de las tiendas que nos podían interesar. Estuvimos toda la mañana caminando por la calle Palma y visitando tiendas de artesanía típica del país entre otras cosas. No puedo dar demasiados detalles porque sino ya sabrán lo que les voy a regalar. Solo diré que mi presupuesto para estas cuatro semanas de viaje se vio gravemente afectado por algunas de estas compras... Agradezco a Pati y Miquel el préstamo a corto plazo que me hicieron.
Al acabar las compras fuimos a comer a uno de los restaurantes más conocidos de la zona, Ña Eustaquia, conocido sobretodo por sus chipas, de las que os hablé en otra entrada, y por sus empanadas. Después de comer tocaba descansar por la tarde ya que por la noche íbamos a salir a cenar y a una discoteca para despedirme de la noche paraguaya.
Fuimos a cenar a un restaurante con Pati y una amiga suya, Felipe, Javi, Paulina, Martha, Maggie, Fatima, Karin y Miquel y la verdad es que la comida estaba muy buena. Al acabar la cena, hubo quien prefirió volver a casa debido a que el frío paraguayo no perdona a nadie y había algunos síntomas de resfriado en alguno de los presentes. Los demás decidimos salir a la discoteca Liquid.
La discoteca fue genial, había mucha gente concentrada allá porque este fin de semana se celebraba el día de la amistad que es el próximo Lunes. En un principio éramos Miquel, Martha, Fatima y Maggie, pero Miquel se estresó un poco con tanta gente y prefirió volver a casa temprano. Los demás nos quedamos hasta casi las 6:00 de la mañana y acabamos muertos. Una gran despedida.
Como podéis imaginar, hoy he dormido hasta tarde para poder recuperarme del cansancio de ayer noche. Por la tarde he estado haciendo las maletas y preparando todo para mi viaje de vuelta que sale a las 4:35 de la madrugada del Lunes (horrible). Aunque lo peor no es eso, lo peor es que llegaré a Sao Paolo hacia las 7:00 de la mañana y hasta las 13:00 no sale mi próximo vuelo hacia Roma. Ya me he preparado libros, música y películas para pasar el rato.
Por la noche ha venido Pati a vernos a casa y hemos ido a cenar con ella, Felipe y Miquel para hacer una despedida más íntima de mis compañeros de casa y Pati. Ahora acabamos de volver.
Me gustaría dar las gracias a todo el equipo de Alda que se ha portado genial conmigo desde que llegué. Como he dicho muchas veces, vale mucho la pena este viaje y esta experiencia y, personalmente, creo que se aprende mucho conociendo otras realidad y otras culturas como la Paraguaya. Dar las gracias especialmente a Miquel y Felipe por cuidar de mí estos días y por estar siempre pendientes de mi a la hora de hacer cosas o incluso cuando estaba enfermo. Sois unos soletes!!
También quiero dar las gracias a todos los que habéis estado siguiendo mi blog a diario, se que tengo fans incondicionales sobretodo en el ámbito materno. Especial mención a la madre de Miquel que, según él, está encantada con el blog porque así se entera de lo que hace su hijo. Siento no poder seguir informando, tal vez podría seguir él con el blog...
Y por último, dar mil y mil gracias a mis padres por haber creado esta fundación. No sólo por la inmensa labor que están llevando a cabo en Paraguay que está ayudando a miles de niños que lo van a agradecer toda su vida, ni por conseguir que la calidad de la educación y de las vidas de muchas familias mejore considerablemente, ni por impartir valores tan necesarios hoy en día como el esfuerzo, el trabajo en equipo, el respeto o la disciplina, sino por hacerme sentir ENORMEMENTE ORGULLOSO de ser su hijo. Para mí, venir aquí a visitar los proyectos y que tanto alumnos como profesores me den las gracias por el trabajo que estamos haciendo me llena de orgullo. Ver a tantos niños felices asistiendo a clases y mejorando la calidad de su educación y de su vida en general me hace sentir tan feliz que creo que es demasiado difícil de expresar con palabras. Ojalá os animéis a venir y a conocer este país y esta fundación porque os aseguro que es una experiencia increíble e inolvidable. Yo he estado intentando explicároslo a diario para que os hagáis una idea de lo que se puede ver y conocer en Paraguay y en la fundación Alda, pero se tiene que ver con los propios ojos para entenderlo plenamente.
Espero que os haya gustado el blog y que haya servido para que os entre el gusanillo de conocer en más profundidad un país tan maravilloso como Paraguay.
Un beso muy fuerte a todos.
David
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